Tengo
que reconocer que la primer vez que probé la simulación de Auti-Sim
me resultó muy impactante, desagradable y angustiosa. Se trata de un
videojuego que coloca al jugador en el lugar de una persona con
autismo, más concretamente en sus pies.
La
simulación se desarrolla en un parque al aire libre con varios niños
jugando en los columpios, corriendo, riendo. Cuando el jugador se
acerca a esos niños, y a medida que se va acercando se distorsiona
la vista y el ruido se hace imposible de soportar.
Según
sus autores, Rock, Paper, Shotgun, es una herramienta pensada para
entender la condición del autismo, conocer los efectos que la
cercanía a las personas causa en ellos y podernos poner “en sus
zapatos”. De este modo entenderemos un poco más algunas conductas
y situaciones de estrés por las que pasan estas personas a diario.
Os
invitamos a probar
este nuevo simulador y comentarnos cuales son vuestras impresiones.
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